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Redacción El Sol de la República
Hasta la mañana de este martes, la tranquila ciudad de San Cristóbal se ve sumida en una pesadilla de devastación y tristeza, después de una explosión catastrófica que ha dejado un saldo trágico. Once personas han perdido la vida, otras once están desaparecidas y cincuenta y dos resultaron heridas en el impactante suceso. La alcaldía de la ciudad ha declarado un estado de duelo, sumiendo a sus habitantes en un profundo pesar por la pérdida de vidas y la destrucción que ha afectado a la comunidad.
El alcalde José Montás compartió detalles desgarradores sobre el incidente que sacudió la zona comercial de la calle Padre Ayala, dejando a su paso edificios colapsados y 17 vehículos reducidos a escombros. El fuego, aún ardiente, continúa desafiando los esfuerzos de los valientes equipos de bomberos que trabajan incansablemente para sofocar las llamas y mitigar los daños.
Con una voz cargada de emotividad, el alcalde no pudo proporcionar información sobre las identidades de las víctimas mortales, pero anticipó que estos nombres podrían ser compartidos en la próxima rueda de prensa que se llevará a cabo con la presencia del presidente Luis Abinader. En medio de la incertidumbre y el luto, la comunidad espera ansiosamente obtener más detalles sobre la magnitud de la tragedia y las circunstancias que llevaron a esta desgarradora explosión.
En un esfuerzo por brindar apoyo y consuelo a las familias afectadas, Montás aseguró que el Gobierno ha establecido un plan para cubrir los gastos relacionados con la tragedia. Desde los costos médicos hasta los arreglos funerarios, se ha buscado aliviar la carga financiera que pesa sobre aquellos que han perdido a sus seres queridos o han resultado heridos en este evento impactante y trágico.
Mientras tanto, los esfuerzos de rescate y recuperación continúan en medio de una atmósfera sombría y llena de incertidumbre. Se espera que en las próximas horas el incendio sea finalmente controlado, permitiendo que los equipos técnicos, los bomberos y otros profesionales investiguen las causas que dieron origen a esta devastadora explosión. Montás expresó su esperanza de que se despeje el humo que aún se cierne en la zona para poder desentrañar la verdad detrás de esta tragedia incomprensible.
Con la ciudad ya sumida en duelo, las autoridades están tomando medidas adicionales. Se prevé que la Sala Capitular se reúna pronto para declarar a la provincia de San Cristóbal como zona de desastre, marcando un paso importante en la respuesta y recuperación ante esta impactante catástrofe que ha dejado a la comunidad en estado de shock y dolor.
