Internacional I Argentina
Redacción El Sol de la República
En un giro inesperado, el escenario político de las elecciones primarias en Argentina tomó un rumbo inusual, desafiando las predicciones de muchos expertos. La división prevista en tres tercios de los votos ciudadanos encontró su protagonista en la figura sorprendente de Javier Milei, un ultraderechista económico y líder de La Libertad Avanza.
Con un asombroso respaldo de casi 7 millones de votos, Milei no solo capturó el descontento palpable en la sociedad argentina, sino que también emergió como el precandidato más destacado en todo el espectro político, un logro que pocos podrían haber anticipado.
A medida que avanzaba el recuento de votos, se acortaban las diferencias entre la formación de Milei, que se impuso con un 30,17 %, y las otras dos fuerzas más votadas. La principal coalición opositora, Juntos por el Cambio, representante de la centroderecha, alcanzó un 28,25 %, mientras que la oficialista Unión por la Patria, de orientación peronista, obtuvo un 27,15 %. Este estrecho margen refleja la diversidad y la competencia feroz que caracterizó estas elecciones PASO.
El panorama electoral dejó en evidencia un hecho notable: Patricia Bullrich, ex ministra de Seguridad en el gobierno de Mauricio Macri, se posiciona como una figura clave en el horizonte político. Su victoria en la interna opositora sobre Horacio Rodríguez Larreta, alcalde de Buenos Aires, la coloca en la senda hacia la presidencia, aspirando a convertirse en la tercera mujer en ocupar dicho cargo en la historia del país, después de María Estela Martínez de Perón y Cristina Fernández.
Es crucial destacar que, aunque Unión por la Patria quedó en tercer lugar en términos de votos, el actual ministro de Economía, Sergio Massa, surgirá como candidato a la presidencia. Massa, un candidato "de consenso" dentro del peronismo, logró un respaldo significativo que superó los 5 millones de votos, ubicándose por delante de Bullrich por una diferencia de un millón de sufragios.
En medio de las complejas circunstancias socioeconómicas que atraviesa Argentina, con altos índices de inflación y pobreza, el peronismo ha logrado un respaldo sorprendentemente alto, superando las expectativas. Por otro lado, la coalición Juntos por el Cambio ha experimentado un declive, cayendo considerablemente por debajo de las predicciones que la situaban alrededor del 35 %.
Además de los nombres ya mencionados, otras figuras que han conseguido el respaldo necesario para competir en las elecciones presidenciales del 22 de octubre incluyen al peronista no kirchnerista Juan Schiaretti y Myriam Bregman, candidata del Frente de Izquierda y de Trabajadores.
Estas elecciones primarias han dejado una participación del 69,62 % del electorado, un ligero descenso en comparación con el 76,4 % registrado en 2019.
El proceso electoral involucró a aproximadamente 35,4 millones de argentinos, quienes desempeñaron un papel crucial en la selección de las listas de candidatos que competirán en las elecciones generales. Estas elecciones determinarán al próximo presidente y vicepresidente, así como la renovación de escaños en la Cámara de Diputados y el Senado, y la elección de representantes para el Parlamento del Mercosur.
Las elecciones primarias en Argentina han redefinido el panorama político de manera sorprendente, con resultados que han desafiado las expectativas y resaltado la presencia de figuras inesperadas en el centro de atención política del país.
