Nacional I Justicia
En un giro sorprendente del caso que ha conmocionado al país, Víctor Mateo Encarnación Montero, uno de los implicados en la red de estafa al Estado desmantelada por la Operación Antipulpo, ha optado por declararse culpable de los cargos que le imputa el Ministerio Público.
Encarnación Montero, quien fuera el exdirector técnico de la Oficina Técnica de Supervisión de Obras del Estado (Oisoe) durante la gestión de Francisco Pagán Rodríguez, reveló haber llegado a un acuerdo con el órgano acusador. En su testimonio, explicó su participación en el entramado corrupto y los motivos que lo llevaron a cooperar con la justicia.
Este caso, que ha puesto bajo la lupa a prominentes figuras como los hermanos Alexis y Carmen Magalys Medina Sánchez, ha tenido un alcance que va más allá de la Operación Antipulpo. Encarnación Montero también está relacionado con la Operación Calamar, donde figuran exministros de alto rango como Donald Guerrero, José Ramón Peralta y Gonzalo Castillo.
Al admitir su culpabilidad, Encarnación Montero reconoció haber participado en la falsificación de documentos para el desvío de fondos públicos. Durante su interrogatorio, también proporcionó detalles sobre la implicación de otras personas en el esquema corrupto, incluyendo a Hernando Pichardo y Efraín Camargo.
Sin embargo, la mención de otros implicados en su declaración voluntaria provocó objeciones por parte de la defensa, argumentando que Encarnación Montero no estaba autorizado para discutir la participación de otros vinculados en el proceso.
El reconocimiento de culpabilidad de Encarnación Montero arroja nuevas luces sobre la complejidad de este caso de corrupción y subraya la importancia de la cooperación con las autoridades en la lucha contra la impunidad y la malversación de fondos públicos.
