Internacional | Colombia – Venezuela
Los gobiernos de Colombia y Venezuela han dado un paso más
hacia el reinicio y normalización de las relaciones diplomáticas, que se
mantuvieron rotas durante toda la administración del exmandantario Iván Duque,
tiempo que dejó una difícil brecha que ambos países plantean reconstruir.
El paso fundamental para abonar el camino ha sido la
llegada de los embajadores designados por Caracas y Bogotá para las
delegaciones diplomáticas. Cada uno de ellos sostendrá encuentros con los
presidentes Gustavo Petro y Nicolás Maduro, para presentar sus cartas credenciales.
“Una vez presente mis credenciales ante el presidente Maduro, quedan restablecidas completamente las relaciones entre Venezuela y Colombia”: Embajador Armando Benedetti @AABenedetti pic.twitter.com/eR6QPOdWkv
— Cancillería Colombia (@CancilleriaCol) August 28, 2022
Félix Plasencia ( @plasenciafelixr ) Embajador de Venezuela en Colombia, ya se encuentra en Bogotá para entrega de cartas credenciales ante el Gobierno colombiano.
— Cancillería Colombia (@CancilleriaCol) August 29, 2022
🎥: @PrensaLatina_cu pic.twitter.com/JHweiaiyUO
La misión es abrir un nuevo capítulo que busca ir más allá
del entendimiento. El rescate de la amistad y la hermandad entre dos países
bolivarianos, la paz fronteriza y el trabajo conjunto para resolver las
dificultades sociales, también forman parte de la agenda binacional.
Sin embargo, entre los temas por resolver está la polémica
la situación con la empresa Monómeros, con sede en la ciudad colombiana de
Barranquilla y que pertenece al Estado venezolano como filial de la
Petroquímica de Venezuela (Pequiven). La compañía estratégica, enfocada en
fertilizantes y agroquímicos, estuvo tomada por años por el grupo vinculado al
exdiputado Juan Guaidó, luego de que este se autoproclamara como
"presidente interino".
Los temas pendientes:
Además de la agenda diplomática, que ya va encaminada hacia
la normalización, ambos gobiernos tienen pleno interés en trabajar sobre temas
prioritarios como el comercio binacional y otros asuntos de mayor dificultad.
Este escenario muestra una clara diferencia si se compara
con las controvertidas relaciones que Caracas y Bogotá sostuvieron durante las
últimas dos décadas, y que estuvieron marcadas por polémicos roces que casi
detonan una guerra.
En el ámbito diplomático hay cuestiones que parecieran ser
irrelevantes, pero que influyen finalmente en la normalización de las
relaciones: una de ellas es retomar el funcionamiento de las sedes diplomáticas
y consulares.
Para Venezuela, con la llegada del embajador Félix
Plasencia a Bogotá, uno de sus primeros pasos será rescatar la embajada y el
consulado que estuvo usurpado y "vandalizado" durante años por el
grupo de Guaidó, quien envió una misión diplomática paralela que contó con el
reconocimiento del gobierno de Duque.
"Los espacios de Venezuela en esta jurisdicción van a
ser rescatados y desde allí vamos a trabajar para atender todo lo que sea
necesario atender", dijo Plasencia a su llegada a Bogotá el domingo.
En paralelo, el embajador colombiano en Caracas, Armando
Benedetti, quien también llegó a la capital venezolana ese día, señaló que una
de las primeras cosas que hará será "pagar el agua, la luz y el
teléfono" de la embajada y los consulados, así como hacer las reparaciones
necesarias en las sedes.
Fuente: RT